Después de tanto tiempo transcurrido desde la última vez que dejé por aquí mi huella, vuelvo a pasear.
Con él tuve todo, sí, volvió de Madrid, pasamos todo el verano entre besos y caricias, en su cama, en la mía. Todo comenzó con un poco de miedo, luego nos fuimos dando en confianza en cuerpo y alma, éramos todo, para mi lo era todo. Pasamos horas interminables en un colchón volvíamos a ser uno cada dos horas, el cielo, la gloria. En la distancia vivía pensándote continuamente, paseando regalando sonrisas por doquier. Entonces terminó todo.
Ha pasado medio años desde que terminó todo, sigo queriéndole, pero hago todo lo posible por convencerme de que no volveré a recaer tal y como recaímos aquella noche de enero, aquella noche de febrero...
Y mientras aún seguíamos con recaídas tú ya estabas enamorándote de otra, me mentiste negándolo, porque aún puedo verte agarrado a su cintura.
Te quiero. Y no volveré a quererte tanto y no volveré a dejarte de querer.
Hace aproximadamente 60 días conocí a alguien, todos los principios son bonitos, pero supongo que ya se cansó de mí porque después de haber conocido su cuarto perdimos contacto. Me ha decepcionado, además fui descubriendo sus defectos, y no soy capaz de consentirlo.